Hoy en día, a la hora de valorar un hotel u otro como opción para alojarse, los clientes ya no tienen en cuenta exclusivamente las características de la habitación y la calidad del restaurante. Especialmente, cuando hablamos de hoteles de lujo, en los que las prestaciones que ofrecen las habitaciones son óptimas y el nivel gastronómico de sus restaurantes es muy parejo, la diferenciación se encuentra en los servicios extra que ofrecen a sus clientes.

Estos servicios pueden ser decisivos en la elección de un viajero, ya que pueden cubrir una serie de necesidades que, de otra manera, el cliente debería buscar de manera externa. Por este motivo, pueden suponen un factor que cambie profundamente la experiencia del cliente y que posicionen a un hotel por delante del resto.

Algunos de los servicios que aún no todos los hoteles ofrecen y siempre están entre los más solicitados por los clientes son los siguientes:

Alquiler de coches. Existen colaboraciones y convenios entre hoteles y compañías de alquiler de coches, las cuales ofrecen mayores facilidades y mejores condiciones a los clientes de dichos hoteles. Desde un taller mecánico especialista recomiendan, a la hora de alquilar un vehículo, tener en cuenta aspectos como la diferencia de conducción entre coches gasolina y diésel o, por ejemplo, entre aquellos con marchas automáticas y manuales.

Recogida y traslado al aeropuerto. Muchos clientes no quieren, o no tienen tiempo, de buscar una compañía externa que cubra este servicio y prefieren que sea el propio hotel quien se encargue de organizar la recogida y traslado al aeropuerto más cercano en un coche privado.

Aparcamiento. Para aquellos clientes que acuden al hotel en su coche particular o de alquiler, supone un gran inconveniente no contar con una plaza de aparcamiento en el propio establecimiento y tener que acudir a un parking externo cuyo coste y seguridad desconocen.

Tratamiento VIP. Los clientes de los hoteles de lujo generalmente quieren sentir que están pagando por una experiencia exclusiva y, por tanto, recibir un tratamiento especial que no encontrarían en otros hoteles de menor presupuesto. Esto puede consistir en la colocación en la habitación de elementos como un albornoz, zapatillas, fruta, la posibilidad de reservar una botella de cava y, por supuesto, una atención especial las 24 horas.

Spa y piscina. Durante su estancia, en caso de estar disponibles, los clientes frecuentemente buscan su momento de relax haciendo uso de instalaciones de spa y piscinas, así como de elementos tales como saunas y jacuzzis o servicios de masajes.

Desayuno en la habitación. En ocasiones, los huéspedes quieren poder elegir la posibilidad de que se les suba el desayuno a la habitación en lugar de tener que bajar al restaurante del hotel para hacerlo.

Accesorios tecnológicos. Cada vez más, los clientes quieren poder controlar el mayor número de elementos posible de su habitación con un mando a distancia, así como tener a su disposición dispositivos como tablets o sillones de masaje.

Por tanto, una vez que los hoteles cuentan con habitaciones y restaurantes de alta calidad que justifican su precio, los elementos que marcarán la diferencia y de los que dependerá su posicionamiento son los servicios extra que consigan hacer de la estancia de sus clientes una experiencia satisfactoria e inolvidable.